La higiene laboral es uno de los pilares fundamentales dentro de la prevención de riesgos laborales y la salud en la empresa. Su objetivo es controlar los factores ambientales, técnicos y organizativos presentes en el lugar de trabajo que pueden afectar a la salud física y mental de los trabajadores con el paso del tiempo. A diferencia de la seguridad, que se centra en evitar accidentes inmediatos, la higiene laboral se ocupa de garantizar condiciones saludables y seguras en cada puesto de trabajo. En esta guía conocerás qué es la higiene laboral, cuáles son los riesgos higiénicos más habituales y qué equipamiento es necesario para aplicar las medidas realmente efectivas.
Puntos clave:
- La higiene laboral reduce la exposición a agentes físicos, químicos y biológicos, protegiendo la salud a medio y largo plazo.
- Ventilación, orden, limpieza, mantenimiento y formación son la base para disminuir accidentes y enfermedades profesionales.
- Los vestuarios y las taquillas metálicas organizan los espacios y los EPI, evitando la contaminación cruzada entre zonas y puestos.
¿Qué es la higiene laboral?
La higiene laboral o higiene industrial es la disciplina preventiva que contiene un conjunto de reglas para reconocer, evaluar e implantar los controles necesarios. El objetivo principal de la disciplina será disminuir el riesgo derivado de los factores presentes en el ambiente de trabajo: Analiza agentes físicos, químicos y biológicos, además de aspectos organizativos que influyen en el bienestar del trabajador.
Su fin último es proteger y promover la salud laboral, tanto física como mental de los trabajadores, y favorecer que la actividad se realice en condiciones seguras. Para ello se requieren métodos de evaluación rigurosos y decisiones de ingeniería y organización que permitan tomar medidas eficaces sin perder de vista la viabilidad industrial. Para ello hemos de familiarizarnos con el conocimiento de palabras que vertebran este campo como: medidas, exposición, procedimientos, protocolos o vigilancia.
Veremos como la higiene se asocia directamente a la llamada exposición ocupacional. Al reducirla se minimizan los efectos sobre la salud y se evita volver a situaciones de riesgo elevado.
¿Cuáles son los riesgos higiénicos?
Se consideran riesgos higiénicos los peligros que pueden causar enfermedades o lesiones por intensidad o acumulación. En general, se agrupan en tres bloques principales y en cada uno conviene identificar con precisión las características de la tarea, las instalaciones y el equipo utilizado:
Agentes físicos
- Ruido y vibraciones que afectan al sistema nervioso y a la integridad física.
- Temperatura extrema (calor/frío), corrientes de aire y estrés térmico.
- Radiaciones, iluminación insuficiente y deslumbramientos.
Agentes químicos
- Polvo y humos: sustancias químicas peligrosas y compuestos tóxicos.
- Gases y vapores: mezclas relacionadas con limpieza o producción.
- Residuos peligrosos: derrames y manipulación de los mismos.
Agentes biológicos
- Bacterias, virus y hongos presentes en lugares de trabajo del sector sanitario, empresas de limpieza o el sector agroalimentario.
- Material biológico y superficies contaminadas.
En todos los casos, la evaluación debe incluir una serie de verificaciones: reconocimiento de fuentes de riesgo, rutas de exposición (inhalación, contacto, ingestión), duración de la exposición durante la tarea y comparación con referencias similares si las hubiera. Solo así se pueden seleccionar los controles más adecuados para cada uno de los puestos de trabajo.
¿Cómo prevenir accidentes laborales?
Aunque la higiene se orienta, sobre todo, a evitar enfermedades profesionales, su correcta implantación ayuda a reducir accidentes y disminuir la posibilidad de sufrirlos en cualquier situación. Un entorno limpio, ventilado y ordenado disminuye la probabilidad de caídas, intoxicaciones o explosiones. Para lograrlo hay que tomar decisiones prácticas y seguir procedimientos sencillos:
- Orden y limpieza: Almacenamiento correcto, limpieza inmediata de derrames fortuitos, separación de residuos, y señalización visible. Esto reduce drásticamente el riesgo de sufrir accidente laboral por resbalones o reacciones no deseadas entre contaminantes.
- Ventilación y tratamiento en origen: campanas, filtros y renovación de aire ajustadas a la carga de productos químicos y a la temperatura del proceso.
- Información y formación: carteles de seguridad, protocolos de utilización y prácticas de higiene personal. Incluye pasos para volver a la normalidad tras sufrir alguna incidencia.
- Supervisión y control: inspecciones internas y registro de indicadores en cada centro de trabajo.
Integradas en la rutina, estas acciones reducen los riesgos y sostienen el bienestar del personal.
¿Qué medidas de higiene son efectivas?
Las medidas que generan beneficios inmediatos al controlar los factores de riesgo combinan soluciones de ingeniería, ajustes organizativos y prácticas adecuadas de higiene personal. Su implantación sigue la siguiente jerarquía: eliminar y sustituir el riesgo, aislarlo, reorganizar el trabajo y, por último, proteger al trabajador mediante equipos de protección individual (EPI). El enfoque debe ser pragmático y proporcional a los factores que sean detectados.
| Tipo de medida | Ejemplos | Objetivo |
|---|---|---|
| Eliminación y Sustitución | Eliminar procesos con emisión de polvo. Sustituir disolventes por alternativas con menor toxicidad. | Reducir la exposición y simplificar los controles posteriores. |
| Organización del trabajo | Rotación, reducción de tiempos de exposición, pausas térmicas, limpieza programada de instalaciones. | Disminuir la exposición efectiva en cada trabajador y mejorar la experiencia en el puesto. |
| Higiene personal | Duchas, vestuarios, taquillas metálicas dobles, lavado de manos, protocolos de cambio. | Evitar contaminación cruzada y la transferencia involuntaria al hogar. |
| EPIs | Guantes, protección ocular y facial, mascarillas, protectores auditivos y ropa de trabajo. | Proteger la integridad físico-mental como última barrera. |
| Vigilancia | Mediciones periódicas y registro: evaluación y control planificado. | Comprobar eficacia y reajustar los procedimientos. |
Cuando estas medidas se apoyan en datos y en la experiencia de los profesionales, la empresa logra una mayor eficacia y reducción de costes asociados a bajas. Esto se traduce en un ambiente de trabajo más seguro, saludable y eficiente.
¿Cuál es la ley sobre higiene laboral?
La ley actual en materia de prevención define de forma detallada las garantías y responsabilidades del empresario y de los trabajadores. El eje normativo lo constituye la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales y su desarrollo reglamentario se ha llevado a cabo mediante decretos y reales decretos, con vigencia desde su publicación.
Las autoridades que intervienen principalmente en este marco son: el ministerio de trabajo, la seguridad social, y las respectivas Comunidades Autónomas. La inspección de trabajo verifica el cumplimiento y puede requerir adaptaciones o mejoras. La empresa debe consultar a los delegados de prevención y, en su caso, al comité de seguridad.
La gestión preventiva se articula a través de los higienistas ocupacionales pertenecientes a los servicios de prevención propios o externos a la empresa. Su labor se orienta hacia la protección de la seguridad en el trabajo. Para ello, identifican los riesgos laborales y los riesgos derivados del trabajo, y desarrollan la implantación de las medidas preventivas necesarias.
Taquillas metálicas: su utilidad para la higiene laboral
Los vestuarios y las taquillas metálicas son esenciales: separan ropa de calle y de trabajo, ordenan EPIs y ayudan a garantizar hábitos de higiene. Su diseño debe responder a características reales de uso: turnos, puestos de trabajo, tamaño de prendas e instalaciones existentes.
Requisitos prácticos:
- Ubicación lógica junto a las zonas productivas, con flujos diferenciados.
- Ventilación, materiales lavables y limpieza planificada del área de trabajo.
- Taquillas dobles para ropa limpia y sucia.
- Espacios de almacenaje y armarios para la conservación de los equipos y EPIs.
- Cartelería sencilla que incluya normas de utilización, lavado de manos y gestión de residuos.